El poder añejo: la fuerza de la Corporación Castillo Hermanos
0Desde fines del siglo XIX hasta los años de las dictaduras liberales, la familia Castillo comenzó a recibir beneficios fiscales y apoyo en protegerlos de competencia. Eso la convirtió en un gran monopolio industrial. Ese gran poder, ahora diversificado y gigantesco, se ha expresado en la política. Desde allí cabildean sus intereses. Entre las principales figuras familiares está Ricardo Castillo Sinibaldi, que pasó de ser vicepresidenciable del Partido Patriota en 2007 a asesor personal ad honorem de Jimmy Morales en este 2016.
Por Luis Solano
Este es una versión resumida de un artículo más amplio, publicado en 2006 en El Observador.
El capital de los Castillo
Tras consolidarse como un monopolio en la producción de cerveza nacional a través de la empresa matriz Cervercería Centroamericana y su marca Gallo, ramificarse después a los servicios financieros en la época de los 70 con su única presencia en el Banco Industrial (BI), e incursionar de manera clave, junto a otros otros grupos familiares industriales, en la fundación de medios de comunicación escritos que hoy expresan abiertamente sus posiciones, tres ramas de la original familia de los hermanos Castillo Córdoba se encuentran activas o por lo menos son públicas en la actualidad, tanto en los negocios como en la administración pública, a saber: Los Castillo Monge, los Castillo Love, y los Castillo Sinibaldi.
A mediados de la década del 2000, en lo negocios se encontraban en una etapa de expansión y competencia acelerada, provocada por el contexto de apertura, globalización y la moda de los Tratados de Libre Comercio (TLC) con varios países, pero especialmente el que entró en vigencia en 2006 con Estados Unidos, en donde participan Centroamérica y República Dominicana.
Pasaron a la producción de alimentos a través de una de sus empresas clave como es Alimentos de Guatemala S.A., desde donde por ejemplo, pasaron a competir en el mercado nacional de los snacks a través de la marca Señorial, luego de que la empresa mexicana Sabritas comprara la Filler’s, que venía produciendo estas mercancías en el país años atrás. También pasaron a competir en el mercado de las bebidas, y particularmente en el de los jugos de frutas enlatados, produciendo la marca Del Frutal. Esto lo hicieron frente a la fábrica Kern’s, de capital externo, que hasta los 90 tuvo el monopolio. Pero este mercado se ha ido diversificando en los últimos cinco años, y ha ingresado capital externo a través de la marca Campell’s, que produce fundamentalmente jugos combinados con frutas y verduras.
En esta misma rama de las bebidas enlatadas, la Corporación Castillo Hermanos pasó a competir en la década de los 90 en la producción de jugos de naranja elaborados con preservantes, con la marca Tampico Citrus Punch, distribuida por Productos Maravilla, en un mercado en donde la competencia es fuerte, ya que por lo menos hay otras tres marcas que producen el mismo tipo de bebida, a saber: La Pradera, la costarricense Dos Pinos, y Del Sol. Recientemente incursionó en la producción de jugo de naranja pero que es producido a base de pulpa con las marcas Campestre y De la Granja, en un mercado en donde también la competencia es fuerte y se ha diversificado, así como donde hay incursión de capital extranjero. Aquí, los Castillo compiten con otra marca nacional como lo es Rabinal, y con un grupo hondureño como los Zablah, que producen y exportan a Guatemala la marca Sula.
También está incursionando en el mercado de bebidas energizantes con la producción de Revive y Powerade, compitiendo aquí con la otra marca Gatorade. Por el lado de la producción de cerveza, la Corporación Castillo ha segmentado y diversificado este mercado a tal punto que en la actualidad, está produciendo de seis a ocho variedades nacionales de las vendidas actualmente. Hasta hace poco, los Castillo Hermanos estaban tranquilos porque nadie les hacía competencia en esta producción, ni siquiera las marcas estadounidenses. Sin embargo, en un proceso expansivo en Latinoamérica, incluyendo Centroamérica lógicamente, entró al mercado nacional la poderosa brasileña Corporación AmBeb y su marca Brava, versión guatemalteca de la cerveza brasileña Brama.
Esta situación provocó un mayor proceso de segmentación del mercado por parte de esta corporación y la salida al mercado en ese momento para hacer competencia a Brahva, de la cerveza Victoria. Ambeb inclusive absorbió en un tiempo record, por lo menos, una tercera parte de la demanda de la cerveza Gallo. Pero como el capital tiende a hacer alianzas y a fundirse sin importar los signos, la “competencia” concluyó con una especie de “pacto de caballeros” entre ambas corporaciones que tuvo de fondo, una distribución “equitativa” del mercado nacional.
Los Castillo Hermanos son también distribuidores nacionales de la marca Pepsi Cola desde donde compiten con Coca Cola y la nueva Big Cola. Sin embargo, también crearon su propia marca de esta bebida con la Super Cola, distribuida desde los Super 24, cadenas de paso inauguradas por esta corporación en los años 80. Más recientemente, en 2005, esa familia, en la que sobresale Jorge Castillo Love, se alió con el Grupo Multi Inversiones para la construcción del megacentro comercial Pradera Concepción, con lo que amplió sus inversiones al ramo de la construcción.
Otra rama de la familia, los Castillo Sinibaldi, a través de Ricardo Castillo Sinibaldi, particularmente se encuentran embarcados en la construcción de los complejos hoteleros y turísticos: Xocomil, Xetutul, y los hostales con diferentes nombres, en el marco del Instituto de Recreación de los Trabajadores (IRTRA), al ser éste el Presidente vitalicio de dicha insitución. Ricardo Castillo es uno de los miembros de la familia que ha estado en la gestión pública haciendo gobierno y ha saltado a la política desde el año 2003, cuando en la coyuntura de las elecciones de ese año, fundó el Partido Solidaridad Nacional (PSN) y se postuló inicialmente en la candidatura inicial del mismo, para luego renunciar a ésta cuando este partido pasó a conformar la coalición GANA.
El proyecto político
Las distintas fracciones del capital económico, con la excepción de Alvaro Arzú y el Partido Unionista, confluyeron en la conformación de la GANA para las elecciones de 2003, con dos propósitos fundamentales: impedir que los eferregistas repitieran en el Ejecutivo, e intentar conformar una fuerza que representara sus distintos intereses.
El objetivo de construir un partido político único, la GANA, que se perfilaba como el proyecto partidista que pudiera recoger la experiencia salvadoreña del derechista partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), se vio en poco tiempo cuesta arriba, particularmente porque el apoyo con el que contaba el partido se debilitó cuando el principal bloque económico que lo respaldó, entre ellos Multi Inversiones, la familia Castillo y los Novella, se lo quitó.
Para el 2007, según las cifras del Tribunal Supremo Electoral (TSE), el Partido Patriota (PP) citó entre sus principales financistas a las empresas Inversiones Napoleón, S.A.; Negocios en Línea, S.A.; Sano, S.A.; Impresos Urbanos, S.A., y Farmacias de la Comunidad, que le han aportado cada mes entre Q30 y Q70 mil. Además aparecen el abogado Gustavo Martínez, el azucarero Mario Leal Pivaral y el empresario Ricardo Castillo Sinibaldi a quienes se les considera fuentes financieras muy importantes, y que organizaron cenas en las que recaudaron Q. 2 millones.
En el binomio presidencial destacó como candidato vicepresidencial el empresario Ricardo Castillo Sinibaldi, lo cual explicó el pasado de relaciones de conveniencia entre militares y empresarios: seguridad e inversiones, factores fundamentales que dieron seguimiento a los planes de largo plazo trazados por el gobierno y grupos económicos de la administración de Óscar Berger.
Castillo Sinibaldi es más conocido por personificar los parques recreativos del Instituto de Recreación de los Trabajadores (IRTA) cuya Junta Directiva él preside, construidos o reconstruidos con millonarias inversiones provenientes de los principales capitales del país durante la última década y con el favor de una serie de exenciones por parte de los gobiernos de turno. Pero a nivel empresarial, además de haber ocupado altos cargos en las dos principales instancias de poder empresarial como lo son el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF) y la Asociación de Amigos del País, también se le recuerda por sus estrechos vínculos directivos con la Embotelladora La Mariposa, que ha administrado la franquicia de Pepsi Cola en Guatemala; y la Embotelladora del Pacífico que es la representación de Coca Cola en el país. La primera de las empresas es miembro del Grupo CABCORP.
Proveniente de una familia de industriales, Castillo Sinibadi, quien también ha sido un alto directivo de la influyente Cámara de Industria (CIG) que los aglutina, fue el primer Presidente del Banco Industrial (BI). Hoy, uno de sus hijos, el empresario José Andrés Castillo Arenales también es miembro del Consejo de Administración del BI, aunque sus negocios se concentran en la industria panificadora: Corpan en El Salvador y Panadería San Martín en Guatemala.
Los Castillo Monge, rama de la familia Castillo que hoy compite entre ella a través del Grupo CABCORP y su empresa insignia la Cervecería Río, localizada en el departamento de Zacapa, influyó fuertemente en el PP en las elecciones de 2007. Previo a las elecciones contra la UNE, se anunció que el posible Ministro de Finanzas Públicas sería José Raúl González Merlo, en ese momento Vicepresidente de Finanzas de CABCORP, quien también se desempeñó como columnista del diario Prensa Libre y ha ocupado altos cargos directivos en la UFM y el Centro de Investigaciones Económicas y Sociales (CEES) de la misma universidad.
La UFM, una universidad privada que concentra lo más granado de las familias élite guatemaltecas, se inclinó en 2007 por el PP. El Secretario General de esa universidad es Jorge Ricardo Castillo Arenales, otro de los hijos de Castillo Sinibaldi, quien también es un alto directivo de CEES de la UFM.
Completó el cuadro el actual Embajador de Guatemala en Washington, José Guillermo Castillo Villacorta, un empresario proveniente de la familia Castillo, quien se ha desempeñado en diversas áreas. Se le mencionó como Ministro de Relaciones Exteriores del PP. Fue Vicepresidente de Planificación Estratégica de la Cervecería Centroamericana; Viceministro y Ministro de Economía durante el gobierno de Álvaro Arzú, encargado de las negociaciones del acuerdo de libre comercio con México; Director de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (FUNDESA); Director y Presidente de la Fundación para el Desarrollo Económico y Sostenible (FUNDES), y Director de la Fundación Mariano y Rafael Castillo Córdova.
En las negociaciones del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (CAFTA-DR, por sus siglas en inglés) Castillo Villacorta logró proteger al monopolio cervecero guatemalteco, otorgándole 15 años para su apertura al tratado comercial.
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