Breve visita a Dalila Mérida en la cárcel de mujeres de Quetzaltenango
2…no he cometido ningún delito, no he hecho nada malo…”
Entrada al Centro Preventivo para Mujeres de Quetzaltenango. Foto: Cecilia Mérida.
Llegar a la cárcel me produce siempre la misma sensación de malestar e indignación. Hoy caminé sobre las calles de Quetzaltenango, esas tan bonitas, empedradas, vestidas de casas antiguas, llenas de sol pero sobre las cuales están inscritas historias indecibles propias de una clase pudiente, de los ricos de antaño que las habitaron y los pobres que les sirvieron. Un letrero en la esquina de la 1ª. Calle y 12 avenida o Cuesta de San Nicolás, zona 1, indica cruzar a la izquierda y dice “una vía”. Cruzo y me pregunto ¿cuál vía nos queda?
Por Alba Cecilia Mérida
Quetzaltenango, 29 de septiembre de 2016
Me aproximo a la casa de piedra, ya casi derruida y me estremece poner mi mano sobre un aldabón en forma de mano de mujer: toco para entrar al centro preventivo para mujeres de Quetzaltenango. Ya sé lo que hay que decir y como decirlo para lograr los tan ansiados minutos para ver, abrazar, escuchar a otra prisionera política: Dalila Mérida Escobar, activista del Comité de Unidad Campesina, CUC “mi organización” dice ella.
Cuando nos encontramos en la entrada de la cárcel, nos vimos, nos abrazamos, le dije soy Cecilia Mérida, la vengo a ver. Ella sonrío y me dijo “la conozco, la vi cuando usted habló en una actividad por la libertad de su esposo y creo que somos hermanas porque tenemos el mismo apellido” solo respiré profundo porque sé que nunca una debe de llorar ante un preso político o ante una presa política. Ella está vestida con una licra roja llena de flores de colores, sus zapatos tenis son grises y con correas rosadas, lleva puesto uno de esos suéteres calientitos, color café suave con un cuello como de peluche. Pienso para ella que es costeña, como le decimos los quezaltecos a los de la costa, este frío de Xela la debe de estar matando. Sus manos delgadas están frías, frías pero llenas de colores por las pulseras que las adornan y sus uñas todavía guardan color corinto con unos diseños brillantes, porque como ella dijo “el sábado cuando me capturaron estaba vestida con falda y zapatos altos” Claro, una se viste bonito para ir a la universidad. La veo y reconozco esa mirada que solo he visto en los ojos de los prisioneros políticos. Es una mezcla extraña, su rostro sonríe pero sus ojos tienen una mirada viendo al vacío, como a la expectativa. No importa que te digan “estoy bien” porque ese gesto y mirar para abajo te está diciendo “sáquenme de aquí”.
Dalila Mérida en el Encuentro Regional de Mujeres «Fidel Asencio» Costa Sur. Foto: Comité de Unidad Campesina CUC.
Dalila Mérida es acusada de usurpación agravada. Ella junto a otros luchadores sociales, como lo somos todas las personas que defendemos nuestros derechos ante las atrocidades cometidas por el Estado guatemalteco, por finqueros, terratenientes y lacayos de la oligarquía, han demandado justicia ante el robo de su cuota laboral por los empleadores de la Finca San Gregorio, Piedra Parada, localizada en Coatepeque y administrada por la poderosa familia Campollo. Quienes hoy hacen esta demanda
Han descubierto que los patronos se habrían apropiado durante 30 años de la cuota laboral, destinada a la Seguridad Social, es decir, retuvieron indebidamente, la cuota laboral, para nunca entregarla al IGSS. Resultando de ello la desprotección a sus trabajadores.”[1]
Dalila Mérida, narra que fue capturada el sábado 24 de septiembre de 2016 alrededor de las 17:00 horas, cuando salía de la extensión universitaria de la Universidad Rural, donde cursa el 4º. Semestre de derecho. Se percató desde la mañana de ese día del ingreso de una radio patrulla de la Policía Nacional Civil. Ella y otro compañero de lucha, sintieron miedo pero permanecieron en el campus universitario confiando en que dicha patrulla estaba ahí por cualquier otro motivo. Menos por ellos. Para Dalila era importante estar en sus clases, como lo ha hecho siempre, especialmente luego del 24 de agosto de 2016 cuando su casa fue cateada. Al finalizar las clases y creyendo estar más segura abordó un “busito” el cual al salir a la carretera principal fue interceptado por un pick up blanco y una mujer y un hombre vestidos de particular le pidieon a los pasajeros que bajaran, hicieran una fila y mostraran su DPI. Cuando llegaron a Dalila, dijeron “ella es” y la trasladaron a la subestación de policía en Coatepeque. Inmediatamente la trasladaron a la fría Xelaju.
Daly, como la conocen sus amigos y la llama su familia, es de origen huehueteco, de Llano grande, una comunidad del municipio de Huehuetenango. Tiene dos hijos de 13 y 14 años. Es pedagoga y decidió continuar sus estudios de derecho. De lunes a viernes trabaja en su organización, es la encargada del componente de género, facilita procesos para la prevención de la violencia en contra de las mujeres en buena parte de la región de la Costa Sur. Los sábados estudia y el domingo asiste a su iglesia. En este momento su principal preocupación es su familia “estoy preocupada por ellos, porque no deberían de estar pasando por esto”. Nuevamente se repite el sufrimiento, la angustia, la impotencia. Ella, al igual que nuestros compañeros presos políticos se debate entre la certeza de que su lucha es justa y la desesperación de saber que sus seres queridos están sufriendo porque están en la cárcel injustamente.
Le hago la pregunta obligada “qué necesita” ella dice “nada, estoy bien, ayer vino mi familia y me trajeron ropa, chamarras, porque estoy durmiendo en el suelo”. Le insisto “si en algo la podemos apoyar, para esto estamos allá afuera” Sentí como en este momento se quebró, sus ojitos claros se pusieron más tristes. Le pedí que sea fuerte, que ella tiene que seguir haciendo su parte ahí adentro, eso significa comer, moverse, hacer ejercicio, ocupar sus manos y mente en algo; prometiéndole que afuera hay, habemos muchas personas luchando por su pronta liberación.
Ella está confiada en su organización, agradeció la visita de los compañeros y compañeras del CUC el día miércoles 28, la confortaron y confía en que saldrá libre, luego de la primera audiencia de declaración que se espera sea este viernes 30 de septiembre a las 14:00 en Coatepeque.
Para finalizar, le pregunté si deseaba enviar algún mensaje y dijo
agradecer el apoyo que he recibido, agradecer a todas las personas que se han comunicado con su familia. Espero que esto termine pronto, pero no me arrepiento, porque no he cometido ningún delito, no he hecho nada malo y si para lograr justicia tengo que estar en la cárcel, entonces valió la pena luchar por esos viejitos a los dejaron sin sus derechos”.
Aldabón en la puerta de la cárcel para mujeres de xelajú. Foto: Cecilia Mérida.
[1] http://elperiodico.com.gt/2016/09/29/opinion/finqueros-estafan-a-trabajadores/
El pueblo, habla de nuevo,
MUJER EJEMPLO DE HOMBRE Y DE JUSTICIA
Tú, mujer fuisteis y serás el ejemplo de hombre y justicia….,
Tú forma de vida, anacoreta, humildemente tomasteis la hoz en símbolo del campesino
y el martillo representando Al obrero en la gran ciudad- alzasteis nuestra bandera……… camino al triunfo mujer ejemplo de hombre. De figura frágil, de carácter fuerte; demostrasteis que las… apariencias engañan… aparentemente se creía, se veía que eras mujer ¡jota! ¡Pero estábamos equivocados,,,, ¡Nos equivocamos en ti mujer, ejemplo de hombre y de justicia! Equivocados en ti mujer, cuando tomasteis el control del problema……. ¡cuando ella….! Mujer desconocida realizasteis tu arenga….., ¡Ha mujer desconocida! Realizó, su arenga, abrupta mente nos dejó pasmados boca abierta junto con otros políticos y oradores de transcendencia afamada… por políticos hipócritas, déspotas. Demostrando su dócima de enfado, A los políticos fue tan grande su enfado….., causado por una mujer ¡ejemplo de hombre y de justicia! Qué trataron callarle, con la fuerza pública……,Pero no pudieron romper la barrera humana……, del desamparado obrero y campesino…, en este momento….., El pueblo se alzó…, y en poco tiempo de lucha…Se alcanzó al triunfo anhelado; derrocando a los opresores del pueblo, humilde obrero campesino. Hoy recibieron su merecido….., ¡Ha estos políticos! Ahora están refugiados en una bandera extranjera; cobarde mente se dieron a la fuga ¡huyendo de la justicia del pueblo! Sí regresan algún día ¡Tendrán que humillarse! A los pies descalzos del obrero campesino con él amparo de la ¡mujer, ejemplo… de hombre y justicia! En la vida humana, mujer desconocida realizasteis tu arenga…, sin contar las innumerables dificultades a enfrentar…., demostrasteis con sabiduría eterna; ordenada demostrasteis educación y voluntad del hombre, que tiene el campesino obrero…. la dignidad de hacer el bien…, Conformidad del conocimiento al camino de la verdad….. ¡Es la justicia! ¡Tú, mujer ejemplo de hombre y justicia, Nos enseñasteis, nos demostrasteis la razón de la práctica hacía la justicia, es en realidad la razón nos la disteis… la idea del ser hombres de ciencia pegada a la verdad de la justicia en dos caminos de fe…, La verdadera admite la fe, la verdadera fe….reconoce necesariamente la ciencia y justicia de la libertad…, a la obra del alma humana, de la mujer ejemplo de hombre….de querer alimentar a estos hijos de una pesadilla, involuntaria causada por la injusticia…..De los políticos ineptos; rescatando a estos hijos de la garra de la muerte…del dolor y de la pobreza; con el amparo de la mujer ejemplo de hombre y justicia… que obligo al campesino obrero a elegir la piedra de base….., que habían rechazado inicialmente dejándolo a un lado.., sí la tierra es necesaria para el arado… es como una nueva palabra; que viene al mundo necesita pañales y vendas……..Sí glorificasteis mujer el dolor y la pobreza; cobrando valor al derecho a la vida de la….. ¡La libertad no ha muerto aun! Aquella mujer desconocida que dio un fuerte grito ¡hágase la luz de la sabiduría y la igualdad del ser……….! nos dimos cuenta que ese grito era la victoria sobre la oscuridad… puesta por los políticos…que vedando el conocimiento al pueblo, que es la mayor y maravillosa que existe en el mundo; la creación a la cultura equilibrando los poderes inmortalizando la visión de la verdad eterna, Felices aquellos que han encontrado la creación de su alma. Desgraciados aquellos que nutren la falacia y engordan a la ignorancia y a la muerte ¡ha…….!, ustedes le hablo que uno a uno recogerá la cosecha sembrada por ustedes, criaturas inquietas…. con seguir con la opresión volveremos otra vez…as. ¡Bendita seas, mujer ejemplo de hombre y justicia! «La Justicia es ciega» ¡pero no la mujer que la representa!
[…] Publicado el 29 de septiembre en: https://cmiguate.org/breve-visita-a-dalila-merida-en-la-carcel-de-mujeres-de-quetzaltenango/ […]